Durante 2024, las cifras de personas que migraron a Estados Unidos reflejan una disminución de ecuatorianos en tránsito en las rutas centrales.
No obstante, 2024 es un reflejo de lo que pasará después con los migrantes ecuatorianos ya que la reducción de migrantes al país norteamericano cayó en un 80%. Pues, en la calles ya se escuchan que cada vez hay menos interés por viajar a ese país por las políticas migratorias de Donald Trump.
La Cancillería, no obstante, estima desde ya que los migrantes ecuatorianos que busquen llegar a Estados Unidos tanto por via legal como ilegal irá en descenso al menos los próximos seis años.
Pues la incertidumbre no sólo recae en los ecuatorianos que están aquí sino en los que están allá, sobre todo en los que lo hicieron los últimos diez años.
Por ello, muchos prefieren ser cautos en viajar porque no saben el futuro de sus amigos o familiares en el exterior y esperan ver qué sucede para tomar una decisión. Mientras que quiénes viven en Estados Unidos y saben que sí llegan a ser deportados están claros que tienen que empezar de nuevo en el país «pese las dificultades que esto conlleva».
En Estados Unidos se estima que está el 80% de la comunidad migrente ecuatoriana, por lo que incluso analistas económicos como Vicente Albornoz ya alertan de una caída de remesas en los próximos años. Por lo que sugieren «tener un modelo económico propio» que dependa cada vez menos de las remesas.
A esto se añade las complicaciones migratorias de Panamá para impedir pasos ilegales como la selva del Darién.