Ecuador tiene ochenta días de conflicto armado interno. El Gobierno de Daniel Noboa declaró la existencia de un enfrentamiento interno contra 22 bandas delictivas, que fueron catalogadas como grupos terroristas.
Con esta declaratoria, los uniformados mandados a las calles para colaborar con el control urbano. Además, las Fuerzas Armadas (FF.AA.) tomaron el control interno de 12 de las 36 prisiones del Ecuador y la Policía de los perímetros exteriores de todos los centros carcelarios.
Esta estrategia de seguridad, de acuerdo con el Gobierno y la Policía Nacional, ha dado sus frutos. Según los datos que maneja la Policía, las muertes violentas se redujeron un 27% frente a los datos que manejaba el gobierno de Guillermo Lasso.
En el gobierno anterior, había un promedio semanal de 162 asesinatos. Mientras que desde la posesión de Noboa la media es de 117 crímenes por semana. Este crimen es el principal indicador de violencia e inseguridad en un país.
Desde el primero de enero hasta mediados de marzo de este año, en el país se perpetraron 1.199 homicidios. En el mismo período de 2023, en cambio, se registraron 1.489 muertes violentas.
Sobre la base de esos datos, la Policía hizo un modelo matemático para proyectar lo que podría suceder en lo que resta del 2024.
Un estudio, al que Primicias pudo acceder, mostró tres escenarios posibles para las siguientes 36 semanas.
- Optimista: 1.235 muertes violentas
- Realista: 1.487 muertes violentas
- Pesimista: 1.739 muertes violentas
De acuerdo con esta proyección, en 2024 -en el peor escenario- Ecuador podría llegar a 2.938 muertes violentas. Lo que sería notablemente inferior a los 7.872 asesinatos que hubo en el 2023.
En el 2023, el Ecuador cerró con una tasa de 43,19 muertes por cada 100.000 habitantes. Y si se cumple la proyección pesimista de la Policía, en 2024 se podría cerrar hasta con una tasa de 16,41. La reducción sería del 62,01% al acabar el año.
El mundo criminal se reestructura
De acuerdo con información de fuentes de inteligencia policial, el conflicto armado interno reconfiguró el panorama delictivo en el país.
Así mismo, la captura y homicidio de varios cabecillas produjo un cambio interno en las bandas. Por ejemplo, en la actualidad más de cuarenta líderes de bandas están incomunicados en la Cárcel de Máxima Seguridad La Roca, en Guayaquil.
De acuerdo con la Policía Nacional, así están agrupadas las organizaciones criminales:
Esta nueva división, además, ha provocado el surgimiento de nuevos liderazgos, alianzas y enemigos en el mundo criminal. Lo que, a su vez, genera brotes de violencia focalizados por ajustes de cuentas y pugnas por territorios, de acuerdo con la Policía.
Por ejemplo, el fin de semana del 22 al 25 de marzo del 2024, en el Ecuador hubo 69 homicidios. Seis de estos sucedieron en una masacre en Santa Elena.
De acuerdo con la Policía, se enfrentaron Los Choneros y Los Fatales, que -aunque son aliados- protagonizan una guerra en ese territorio para evitar la fragmentación de la banda.
La Policía dice que si bien este fin de semana fue violento, se mantuvo el promedio diario de 17 asesinatos, que se alcanzó desde la declaratoria del conflicto armado interno. Mientras que antes, hubo días en los que ocurrieron hasta cincuenta muertes violentas.
(La República)