El Pleno del Consejo de la Judicatura, la tarde de este 21 de noviembre, anuló totalmente el concurso de jueces y conjueces para la Corte Nacional de Justicia y todo el proceso empezará desde cero.
La Dirección Jurídica de la Judicatura leyó un informe que hablaba de 17 anomalías durante el concurso. Entre ellas, en la fase de méritos al otorgar puntajes más altos a determinados postulantes. También se resaltó el informe de Contraloría que halló irregularidades en la contratación de Métricas Web, empresa que aplicó las pruebas de confianza a los postulantes.
Solanda Goyes, Merck Benavides y Mario Godoy votaron a favor de acoger el informe jurídico. Solo la vocal Yolanda Yupangui tuvo una postura de que el concurso se mantenga y solo rehaga la fase de pruebas de confianza.
«Si los informes muestran irregularidades, entonces se debe acoger la nulidad total», dijo Benavides. «El concurso no goza de confianza. Hay debilidades en el área de Talento Humano», expresó Goyes.
Por su parte, Godoy explicó que hubo ocultamiento de información de la anterior y vigente administración sobre el alza de puntos a determinados postulantes. «Los jueces y conjueces deben llegar a la Corte Nacional de Justicia con un proceso transparente, con reglas claras y fases respetadas», sostuvo.
Es la segunda vez que el concurso de jueces para la Corte Nacional se anula. La primera vez ocurrió cuando la Judicatura estaba en manos de Wilman Terán, procesado en el caso Metástasis, Independencia Judicial y recientemente en el caso Pantalla, donde se denunció que buscaba que jueces afines ganen el proceso.
Este reciente concurso que se anuló había empezado con la presidencia de Álvaro Román. Se buscaba nombrar 10 jueces y 15 conjueces.
Consideraciones de expertos
El abogado constitucionalista, José Chalco, observa que se está generando una «suerte de provocaciones hacia la nulidad».
«El reabrir etapas precluidas, que ya fueron cerradas, es más bien lo que podría generar defectos conducentes a la nulidad del proceso. (…) Lo sustancial es cumplir con lo que ya se resolvió en su momento, que son las nulidades parciales y respecto a esas nulidades parciales, avanzar. Pero hablar de nuevas nulidades a mí me parece que habla muy mal, no del concurso, sino más bien de esas intenciones de seguir en una suerte de nulidades absolutas que más podría tener una apariencia de intentar beneficiar a quienes hoy no son parte del concurso», analizó para Ecuavisa.com.