La deforestación en la Amazonía cayó un 11,08 % en el último año, hasta situarse en 5.796 kilómetros cuadrados, según datos consolidados presentados este jueves (30.10.2025) por el Gobierno de Brasil, que en noviembre acogerá la COP30 en el mayor pulmón vegetal del planeta.
Se trata del cuarto año seguido con reducciones en la deforestación y el mejor resultado en los últimos once años, según los datos de monitoreo por satélite del sistema Prodes, que es más preciso y detallado que los informes que se divulgan mes a mes.
El 60 % de la deforestación corresponde al corte raso de la vegetación, mientras que el 38 % se debe a la degradación de la vegetación, como resultado de grandes incendios forestales que pueden llevar al colapso del ecosistema.
Zonas con mayor degradación
El proceso de degradación está registrando una tendencia ascendente y en el último año afectó a 2.203 kilómetros cuadrados de selva. La región más afectada es el estado de Pará, cuya capital, Belém, es la sede de la COP30, que se celebra el próximo noviembre.
Esta vasta región, que alberga un pujante sector ganadero y minero, fue responsable del 36,2 % de la deforestación en la Amazonía brasileña, equivalente a 2.098 kilómetros cuadrados, lo que supone un descenso del 12,4 %.
El único estado amazónico que tuvo un deterioro de la situación fue Mato Grosso, mayor productor agropecuario del país y donde la deforestación se disparó un 25 %, hasta los 1.572 kilómetros. Portavoces del Ministerio de Medio Ambiente atribuyeron el mal dato de Mato Grosso a los incendios que afectaron la región a finales del año pasado.
Los datos del Prodes se midieron de agosto de 2024 a julio de 2025, coincidiendo con el régimen pluviométrico en la región amazónica.
(mn/efe, afp)
